
Las
heridas del corazón, no son nada diferentes a las que puede sufrir el resto de
nuestro cuerpo, resulta que cuando nos lastimamos algún musculo, alguna articulación,
algún hueso, debemos cuidarlo, seguir un respectivo “tratamiento” y “cuidado”,
para que en su debido momento esa parte afectada pueda volver a su normalidad.
Todos sabemos que siempre hay diferentes grados de heridas, de fracturas y que
dependiendo de la gravedad de las mismas el cuidado es diferente o más intenso.
¿Por
qué...