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lunes, 30 de abril de 2012

Organo músculoso lleno de sentimiento.

Las heridas del corazón, no son nada diferentes a las que puede sufrir el resto de nuestro cuerpo, resulta que cuando nos lastimamos algún musculo, alguna articulación, algún hueso, debemos cuidarlo, seguir un respectivo “tratamiento” y “cuidado”, para que en su debido momento esa parte afectada pueda volver a su normalidad. Todos sabemos que siempre hay diferentes grados de heridas, de fracturas y que dependiendo de la gravedad de las mismas el cuidado es diferente o más intenso. ¿Por qué...